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Columna

Introduccion:

La mayoría de pacientes con patología de raquis están expuestos a numerosas pruebas diagnósticas, entre las que se incluyen las radiografías simples. Los protocolos postquirúrgicos de nuestros centros incluyen radiografías simples frecuentes durante el primer año de seguimiento, sin embargo la utilidad de estas radiografías no ha sido estudiada minuciosamente.

Objetivos:

El objetivo principal es evaluar la utilidad clínica de las radiografías postoperatorias realizadas durante el primer año de seguimiento en pacientes con fracturas torácicas y/o lumbares a los que se le realizó artrodesis posterolateral.

Material y metodología:

Estudio descriptivo, retrospectivo de una serie de casos clínicos de pacientes diagnosticados de fractura torácica y/o lumbar traumática, a los que se realizó artrodesis posterolateral durante los años 2009-2015 en nuestro centro, con seguimiento de un año. Se analizan la edad, el sexo, patología previa a la cirugía, técnica quirúrgica, número de niveles artrodesados y complicaciones. Se evaluaron diferencias en la distribución de hallazgos relevantes utilizando el test de Ji-cuadrado para variables cualitativas, y test de t de Student para las cuantitativas. Se consideran positivas aquellas radiografías donde se observa aflojamiento, rotura o migración de los implantes, así como fracturas en niveles adyacentes y desequilibrio sagital posterior a la intervención. Los hallazgos radiológicos se consideraron clínicamente significativos si daban como resultado desviación del curso postoperatorio previsto y/o intervenciones adicionales, estableciendo el nivel de significación estadística en p<0,05.

Resultados:

Para 56 pacientes se realizaron 642 radiografías durante el primer año de seguimiento, de las cuales solo el 2.63% fueron positivas. La sensibilidad y especificidad de una radiografía de columna para detectar una anormalidad clínicamente significativa fue del 15,46% y 99,63%, respectivamente, con un VPP 88,24% y VPN 86,88%

Conclusiones:

El 92,9% (IC95%: 82,7-98) de los paciente fueron expuestos a radiografías sin ningún hallazgo clínicamente relevante que requiera un cambio en el manejo posterior de los mismos. Según esto los protocolos deberían reconsiderarse, especialmente en pacientes asintomáticos con el fin de minimizar exposición radiológica, costes, consumo de recursos.